¿Me quiere, no me quiere?

Estoy a una semana de viajar, obviamente quiero poder pasar tiempo con esos amigos/as que no veré en las fiestas. Así que en este viernes pasado estuve a las corridas. Un café con Marta luego de haber hecho un trámite en la facultad...caminamos por la zona de Caballito Este. La "subasta" cerrada! Es uno de los pub que más me gustan por el edificio y por su estética interior, madera, piano, mesa de billar en el primer piso, canastas de maní con cáscaras.
Daniela en Rivadavia y Río de Janeiro. Caminamos hasta el parque Rivadavia para mirar libros en la feria: ahhhhh!
El predicador y una de las sagas completas a $60. Apartate de mi tentación!
Un par de cervezas y el mundo de gente comprando para la noche buena. He decidido no comprar regalos este año. Seré yo el regalo para mi familia y amigos.
Mensaje de celular: no olvidar los lim0nes para las margaritas.
;)
El puesto de flores en la esquina de Rivadavia y Acoyte...Dani que compra jazmines para una amiga ...ahí estaba parado con cara de "quiero un caramelo" Reynaldo, tendría unos 22 años. Típico pibe argentino. Parecía de esos que estudian ingeniería y aman a una piba de la facultad de filosofía y letras. Para un tango.
Antes de llegar nosotras ya se lo veía estar hablando con el vendedor...nos cedió el turno, pensé que aún no sabía que comprar. Estaba equivocada.
Daniela pagó por los jazmines y mientras ella escribía la tarjeta, lo miré al pibe bello por cierto y le pregunté:

-¿qué es lo que querés?

- quiero UNA margarita.

-Cuál es el problema? ( veía que había muchas).

-es que quiero solo una...y no vende de a una....vende todo el ramo.

Parece ser que hacía rato estaba tratando de que el vendedor (ignorante tal vez de la importancia de una margarita sola) le vendiera UNA flor.
Pensé, bueno, que compre el ramo y haga lo que quiera...bueno eso lo pensé yo.
Entonces lo miré y me sonreí.

-cuánto sale el ramo?

- $6

-y cuántas trae?

-creo que seis...( en realidad traía casi dos docenas...EL AMOR NOS TRASTOCA LAS PERSEPCIONES)

-bueno, compremos el ramo y repartimos, yo me llevo las demás.

La cara de felicidad e incredulidad del chango. Compré el ramo, el vendedor se puso más comprensivo: "es que no se pueden separar" decía al tiempo en que yo las separaba. Pero bueno, ya era MI ramo por $6.
Reynaldo eligió una margarita y me pasó $1. Chango, dejate la moneda y alegrale la noche a la piba. Se seguía sonriendo. Decía gracias , no entendía nada... pensaría: par de locas. mujeres...jajaja ...en realidad solidaridad con la belleza.
Seguramente Danu comentará en este post y pondrá un toque menos ontológico.
Pero bueno, las historias son según quiénes las narran, eso quiere decir que siempre hay otra historia...
Me gustaría saber cómo terminó Reynaldo su noche de " me quiere, no me quiere".

Yo también terminé con margaritas...pero eso es otra historia.

:)
Los dejo, me voy al cumple de un amigo.
creo.